Friday, March 21, 2008


En la imagen Grégory Lemarchal que me lo ha descubierto un amigo, pero algo tarde porque el pequeño murió joven el año pasado, una pena porque es un crack. Malditas enfermedades, cuando a alguien cercano le afecta una tomas en consideración muchas cosas.
Una semana santa extraña sin duda. La he percibido llena de visitas fugaces y salidas nocturnas extremas, pero, pese a hacer tantas cosas y no llegar a disfrutar de ella plenamente (dado que el sábado trabajo), tengo la sensación de que está pesada y aburrida porque falta la permanencia. Realmente son días para irse dee Madrid, porque la capital se queda como coja. No existe ese ambiente que se vive en las pequeñas ciudades, pasando ya del misticismo ascético castellano y el faralae brillante del sur.
MAdrid no tiene semana Santa, tiene unos días libres que cada uno aprovecha para largarse al pueblo, que es en definitiva lo sano y lo que hay que hacer. Pero unos pocos, los condenados, tenemos que permanecer atados al curro y ocupando el tiempo como sea; así que me he dejado caer por alguna exposición, algún bar, alguna juerga...
Hemos vuelto en ocasiones a la adolescencia de las borracheras en la calle (no por mi parte, vive Dios, pero sí me ha tocado hacer de nurse en más de un ratito).
Gracias a todas las visitas fugaces y pido que regresen los personajes habituales y que no se monten spin offs fuera de nuestras calles favoritas.
Feliz Semana Sante y ¡cuidado en los coches!

No comments: